Alberto Cormillot

El doctor Alberto Cormillot es el referente argentino a la hora de analizar cuestiones de salud, en especial aquéllas ligadas al peso.

Tras varias décadas de trayectoria, Cormillot es entrevistado sobre la obesidad a raiz de la medicion y pesado de las modelos del alta costura , de Cibeles, en Madrid

N&P: - ¿Cuál es su lectura de acciones de este tipo?
A.C.: - Me parece bien toda señal que dé el Estado en el sentido de que le preocupa el problema del peso de la gente,
Es una buena medida, porque desde los medios de comunicación se da un mensaje que no es el mejor para la gente joven.


N&P: - ¿Cuánto impacta la imagen que se propone desde los medios en las personas?
A.C.: - Muchísimo. Se ha hecho enorme cantidad de estudios sobre la exposición a la televisión y la influencia que tiene. Si no tuviera influencia, nadie la utilizaría para vender cosas. Se la usa porque realmente funciona como medio.




N&P: - ¿Se entiende más la relación directa entre sobrepeso y salud?
A.C.: - Con algunas cosas sí y con otras no. Entienden la relación con algunas enfermedades, pero no con la mayoría; no se lo relaciona con colesterol, triglicéridos, problemas para dormir, psicológicos. Tampoco se lo relaciona con el cáncer, siendo una de las causas más importantes que hay: el 30% de ciertos tipos de cáncer se debe a la obesidad. En la cabeza de la gente, la relación es débil. Y en la acción, menos todavía.
Al vivir en un entorno tóxico, en un ambiente obesogénico, la gente no tiene la culpa. Pero también engorda por una responsabilidad individual porque la opción más fácil es hacer cosas para que engorden. Y al igual que el Estado cambió mucho con el tema del cigarrillo, puede cambiar mucho el tema de la obesidad.

N&P: - ¿Cuál es la realidad de la obesidad en nuestro país?
A.C.: - La obesidad afecta a entre el 45 y el 50 y pico % de las personas, en tanto que la anorexia y la bulimia pueden ser 1% cada una. Las diferencias son brutales.
La obesidad es la segunda causa de muerte después del cigarrillo, y el tener abdomen también, aunque la persona no esté gorda. No hay conocimiento de eso porque la gente o no conoce la medida de su cintura o los médicos no se la toman, y no se la considera como un factor de riesgo independiente.

N&P: - Las proporciones altura, peso, edad, ¿siguen basándose en el modelo norteamericano de décadas pasadas o hay una proporción vinculada a nuestra cultura?
A.C.: - Lo que hay es indicadores de que podemos tomar parámetros parecidos a los de los europeos, porque una gran parte de nuestra población desciende de europeos. Uno podría decir que las medidas de la cintura y el índice de masa corporal serían equivalentes a los de los europeos. Un índice de masa corporal, que es peso dividido altura por dos, (peso/altura*2) tiene que ser entre 18.5 y 25, y un perímetro de cintura que debería ser de 80 - 85 para la mujer como máximo y 95 para el hombre.

N&P: - Respecto a la información que circula en Internet, las medidas según el país, ¿cuál es la correcta?
A.C.: - La medida norteamericana de la cintura, entre 88 y 102, es un número caprichoso, porque tiene que ver con la conversión a libras.
No más de 90, 95 para el hombre. A partir de ahí empieza la obesidad abdominal. Una cosa es el sobrepeso y otra es la obesidad abdominal: una persona puede no tener sobrepeso pero sí tener obesidad abdominal, lo que se traduce en riesgo cardíaco, diabético, metabólico.

Entrevista con Alberto Cormillot

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